¿Por qué no aprovechar un capítulo del Ministerio del Tiempo para reforzar los contenidos vistos en clase a partir del Romanticismo?
Dicho y hecho. El capítulo que habla de Bécquer y esa décima carta (de las nueve reales que conforman “Cartas desde mi celda”) enganchó a los alumnos de PR4 desde el principio. El ambiente misterioso, las gentes del pueblo de Trasmoz dejando entrever algo sospechoso, la extraña actitud de los agentes, el personaje de Mencía, la alusión a las brujas… Todos estos elementos hacían prever el éxito entre este público tan exigente.
Y después, como ya habíamos leído algunas rimas y leyendas del autor sevillano, nos decidimos a investigar un poco más sobre la maldición del pueblo aragonés.
¿Qué pasó en realidad para que Trasmoz fuera excomulgado? ¿Dónde está situado exactamente? ¿Cuánta gente vive ahora allí? ¿Siguen estando malditos?
Para indagar en estas cuestiones, nada mejor que crear una tarea en Classroom y trabajar con ordenadores en clase mediante google docs.
(Imágenes Wikimedia Commons)
Esta herramienta permite ver el progreso de los alumnos mientras ellos van trabajando, al igual que posibilita compartir el documento creado e ir editándolo por varios estudiantes al mismo tiempo.
Ojalá tuviéramos los medios necesarios para poder trabajar más así. El comportamiento de ellos mejora notablemente y su interés por lo que están haciendo también.
¿Qué es ser romántico? ¿Alguna vez os lo habéis planteado? ¿Está relacionado con enviar flores, escribir cartas de amor o acordarse de tener detalles con tu pareja?
Quizás tengamos un concepto equivocado. Fíjate en lo que explica Ramón Gener, el presentador de “This is opera”, en este programa dedicado a Tristán e Isolda.
Ahora, piensa: ¿seguimos siendo románticos hoy en día o hemos pervertido el significado de la palabra?
Igual que Wagner intentó plasmar su desdichada historia de amor en una partitura, ¿creéis que podríamos encontrar ejemplos similares en la música de nuestros días?
Te propongo un juego: lee las siguientes características del Romanticismo y luego intenta buscar paralelismos entre ellas, algunos de los poetas más conocidos del S.XIX y músicos españoles de rap y hip-hop. ¿Te animas?
Ansia de libertad.
Exaltación del “yo” individual.
Concepción del poeta como un ser elegido.
Exaltación de nacionalismos.
Evocación de tiempos pasados (Edad Media) y lugares exóticos como medio de evasión.
Identificación del estado de ánimo con la naturaleza.
Espíritu de rebeldía: personajes aventureros, inadaptados, rebeldes (pirata, por ejemplo).
Sentimiento de soledad y de resignación al sufrimiento.
Exaltación de la imaginación y del sentimiento.
Empezamos con un clásico entre los clásicos: “La canción del pirata”, de Espronceda. Lee el siguiente fragmento:
Con diez cañones por banda, viento en popa, a toda vela, no corta el mar, sino vuela, un velero bergantín. Bajel pirata que llaman, por su bravura, El Temido, en todo mar conocido, del uno al otro confín.
La luna en el mar riela, en la lona gime el viento, y alza en blando movimiento olas de plata y azul; y ve el capitán pirata, cantando alegre en la popa, Asia a un lado, al otro Europa, y allá a su frente Estambul:
«Navega, velero mío, sin temor, que ni enemigo navío ni tormenta, ni bonanza tu rumbo a torcer alcanza, ni a sujetar tu valor.
Veinte presas hemos hecho a despecho del inglés, y han rendido sus pendones cien naciones a mis pies.»
Que es mi barco mi tesoro, que es mi dios la libertad, mi ley, la fuerza y el viento, mi única patria, la mar.
Señala las palabras que expresan ansias de libertad, rebeldía, exaltación de la patria.
Ahora lee el fragmento de “Sobre los márgenes”, de Sharif.
Dame una oportunidad tan solo una oportunidad quiero escribir algo sencillo no me hace falta estribillo. Quiero escribir un verso inmortal, que se entienda sin lenguaje limpio y puro como el sol sobre el paisaje quiero una frase que sirva de pasaje en este viaje lejos del tic tac y su chantaje. Y te regalo una amistad siempre risueña la verdad sin vanidad ni contraseña yo solo sé que el alma nunca se empeña y que lo más importante es eso que nadie te enseña.
Todo mi mundo está aquí chico sabes no nos vamos a rendir tengo velas y viento, suelas y aliento, y un bolígrafo hambriento que no sabe mentir.
Así que voy a seguir ya me da igual tropezar,volver a empezar, sé que la vida es fluir si pa reír hay que aprender a llorar. Y solo dime a donde quieres ir que yo te llevo agárrate a mi boli yo te elevo si en una eternidad siempre hay tiempo para comenzar de nuevo si tú vienes conmigo yo me atrevo. A vivir sencillo, mi piedra en mi bolsillo mi look y mi librillo, la luna su brillo sentado en un bordillo, estoy brindando con un pisto por los corazones que conquisto. Y no me voy a ir, todo mi mundo está aquí en este trozo de folio, el mundo es más amable cuando vives sin odio nunca sabes lo que pasa hasta el siguiente episodio.
Haz lo mismo que con Espronceda. ¿Encuentras conexiones? ¿Qué sentimientos comparten?
Espero que os esté gustando el juego, porque podemos seguir. ¡Adelante! Vayamos ahora a por Bécquer, uno de nuestros poetas más conocidos. ¿Sabíais que sufrió mucho por amor? Pero, además, también escribió sobre la inspiración, la poesía y algunas cosas más. Atreveos a entrar en su mundo. Recordad, seguimos conectando:
III
Sacudimiento extraño que agita las ideas, como huracán que empuja las olas en tropel.
Murmullo que en el alma se eleva y va creciendo como volcán que sordo anuncia que va a arder.
(…) Ideas sin palabras, palabras sin sentido; cadencias que no tienen ni ritmo ni compás.
Tal es la inspiración.
(…) Inteligente mano que en un collar de perlas consigue las indóciles palabras reunir.
(…) Raudal en cuyas ondas su sed la fiebre apaga, oasis que al espíritu devuelve su vigor…
Tal es nuestra razón.
Con ambas siempre en lucha y de ambas vencedor, tan sólo al genio es dado a un yugo atar las dos.
Después de leer estas estrofas, fijaos ahora en uno de los poemas del “Lo vívido vivido”, de Sharif. Sacad conclusiones 😉
La palabra viene después.
La palabra viene después, primero nace la idea, un embrión en la marea aún sin cabeza ni pies.La palabra viene después, antes va el beso, la caricia, romper el espejo de Alicia, y aprender a morir al revés.La palabra viene después, primero van el peón, la torre, el talón de la infancia que corre, del andén imberbe de la niñez.
La palabra viene después, le precede el trueno, la centella, el llanto triste de una estrella que sabe que se va a caer.
La palabra viene después, primero los ojos , la boca, las manos de los ciegos que tocan para poder ver.
La palabra viene después, cuando ya está todo dicho y estamos más cerca del nicho que de la sombra del verde ciprés.
La palabra viene después cuando ya está todo vivido y tu voz se ría del olvido aun cuando tú ya no estés.
¿Qué opináis? ¿Comparten?
Sigamos adelante. Entremos en el tormentoso ámbito del amor. ¿Alguna vez habéis leído las rimas de Bécquer? Sólo os pondré aquí un pequeño ejemplo. Recordad, ¡al final habrá que relacionar! Buscad en ellas las características del Romanticismo que aparecían al principio de la entrada 🙂
RIMA XLIII
Dejé la luz a un lado, y en el borde de la revuelta cama me senté, mudo, sombrío, la pupila inmóvil clavada en la pared.
¿Qué tiempo estuve así? No sé; al dejarme la embriaguez horrible del dolor, expiraba la luz y en mis balcones reía al sol.
Ni sé tampoco en tan horribles horas en qué pensaba o qué pasó por mí; sólo recuerdo que lloré y maldije, y que en aquella noche envejecí.
RIMA XXIV
Dos rojas lenguas de fuego que a un mismo tronco enlazadas se aproximan y, al besarse, forman una sola llama.
Dos notas que del laúd a un tiempo la mano arranca, y en el espacio se encuentran y armoniosas se abrazan.
Dos olas que vienen juntas a morir sobre una playa y que al romper se coronan con un penacho de plata.
Dos jirones de vapor que del lago se levantan y, al juntarse allá en el cielo, forman una nube blanca.
Dos ideas que al par brotan; dos besos que a un tiempo estallan, dos ecos que se confunden; eso son nuestras dos almas.
RIMA LIX
Yo sé cuál el objeto de tus suspiros es; yo conozco la causa de tu dulce secreta languidez.
¿Te ríes?… Algún día sabrás, niña, por qué. Tú acaso lo sospechas, y yo lo sé.
Yo sé cuándo tú sueñas, y lo que en sueños ves; como en un libro, puedo lo que callas en tu frente leer.
¿Te ríes?… Algún día sabrás, niña, por qué. Tú acaso lo sospechas, y yo lo sé.
Yo sé por qué sonríes y lloras a la vez; yo penetro en los senos misteriosos de tu alma de mujer.
¿Te ríes? … Algún día sabrás, niña, por qué; mientras tú sientes mucho y nada sabes, yo, que no siento ya, todo lo sé.
¿Ya lo tenéis? Bien, vamos a acabar con una selección de poemas del poeta y músico de Zaragoza. ¿Seríais capaces de enlazarlos por temas, versos parecidos, intención o estilo?
Tu cuerpo para mí es una sorpresa que se renueva, una silenciosa fiesta infinita que se agita y pestañea. Anoche lo recorrí palmo a palmo y no recuerdo este centímetro de paraíso, este recodo de tu piel que me saluda y me conoce. Acaso te renuevas cada mañana para despistar al viajero que te camina; acaso te descubra a cada caricia, como quien encuentra una nueva estrella en la nueva noche.
Pero tu cuerpo para mí no es sólo tu cuerpo, ese raro milagro que absorbe y refleja la luz en la superficie de tu carne pulida. No. Tu cuerpo para mí es el confín de mi esperanza, la horma exacta de mi deseo.
La estrella que se estremece, la flor que tirita en el viento, un temblor, un pensamiento que si se piensa, desaparece.
Tu cuerpo es la materia donde cristaliza mi alma, eternidad encarcelada en una gota de ámbar.
PRETÉRITO IMPERFECTO
Amenazaba el reloj las cuatro, ya se había desvelado mi alma. Hay quien llama vida a este rato, ingrato ir y venir de albas.
Anestesiaba con miel la carne, y Camarón me quitaba el sentido. Intento escribir para olvidarte, y ni escribo ni te olvido.
Arañaba el sol el cielo con sus rayos como lanzas. Yo corría huyendo del miedo, persiguiendo la esperanza.
Lloraba como niño el hombre porque era culpable de sus delitos y, susurrando al oído tu nombre, el silencio callaba a gritos.
RATITA PRESUMIDA
A ti te ardía el tiempo en la pupila, a mí se me escurría de los dedos; yo sólo veía fantasmas que desfilan, tú no le tenías miedo al miedo.
A ti el húmedo placer de lo mundano, a mí el deseo desesperado y eterno; en tu campo florecían los veranos, en el mío se cuajaban los inviernos.
A ti la risa loca, la brisa suave. Yo sangre en la boca, puerta sin llave. A ti la estrella, la noche pura, yo la vela, centella de la locura.
A ti Pompeya y la lava del volcán, piel que no engaña, pestaña del huracán. Yo hambre de un día, poesía y pan, mala caligrafía y lágrimas de Adán.
A ti la fiesta del sol, la fortuna, a mí la alegría de farol, las espinas, tú haciendo castillos en la luna yo prendiéndole fuego a mis ruinas.
Tú gatita coqueta, yo perro viejo y poeta, enfermo de soledad. Tú guardas mariposas, yo marchito las rosas del jardín de la verdad.
¿Cómo podrían unirse los poemas de Sharif con los de Bécquer? ¿Encuentras el nexo?
Respecto a las características del movimiento romántico, ¿cuántas has podido ver reflejadas entre los textos y las imágenes? (Ya hablaremos de Friedrich, autor de los dos cuadros que aparecen en este final).
Para acabar, ¿creéis que habéis aprendido algo? Espero que sí.
Os propongo una actividad final: en el siguiente enlace encontraréis las Rimas de Bécquer. Leedlas, elegid una y versionadla luego como si fueseis un cantante de rap o hip-hop. Se puede hacer, algunas os sonarán y otras tienen ritmo, rima y lenguaje bastante actual.
Para los que no se sientan llamados por la música, hay una alternativa: convertir alguna rima o alguna de las composiciones de Sharif en un videopoema.